Escribano nival (Plectrophenax nivalis)
Las grises costas invernales del norte de la Península reciben todos los años un pequeño y regular contingente de unas aves originarias de las latitudes más gélidas del continente. Se trata de los escribanos nivales, unos paseriformes de característico plumaje, que se reproducen en las tundras, las montañas y las costas de Escandinavia o Siberia y que invernan en diferentes lugares del centro y oeste de Europa.
Clasificación
Orden: Passeriformes
Familia: Calcariidae
Longitud
16-17 cm
Envergadura
32-38 cm
Identificación
De tamaño semejante a otros escribanos de nuestra fauna, el nival se distingue claramente de aquellos por presentar un plumaje llamativamente blanco, especialmente en verano (
). Las partes dorsales son, fuera de la estación reproductora (
), pardo-rojizas, al igual que el píleo y las mejillas, en tanto que las partes inferiores y la garganta lucen un intenso color blanco, especialmente en los machos.
Ambos sexos presentan unas llamativas y amplias franjas alares blancas. También en el obispillo y las plumas externas de la cola aparecen grandes extensiones blancas, que se hacen particularmente visibles en vuelo.
Los individuos inmaduros que podemos encontrar durante el invierno en España son, en general, menos blancos, de un color marrón grisáceo en el manto y cabeza, y con franjas alares muy reducidas.
La especie suele moverse en pequeños bandos muy activos, aunque bastante confiados.
Canto
Como reclamo emite silbidos agudos, semejantes a un traqueteo, pir-r-r-r-rit. El canto consiste en un trino claro e insistente, poco variado y bastante sencillo.